La nueva Ley de Economía Circular busca transformar la forma en que se producen, consumen y gestionan los recursos.  El senador Waldo Fernández ha sido una de las voces clave en el impulso de este cambio, destacando la urgencia de abandonar la economía lineal y transitar hacia un sistema que promueva el reciclaje, la regeneración y la reutilización.

El país avanza hacia un modelo de desarrollo más sustentable con la propuesta de Ley de Economía Circular, una reforma que busca transformar la forma en que se producen, consumen y gestionan los recursos.

El senador Waldo Fernández ha sido una de las voces clave en el impulso de este cambio, destacando la urgencia de abandonar la economía lineal —basada en producir, usar y desechar— y transitar hacia un sistema que promueva el reciclaje, la regeneración y la reutilización.

“¡Es hora de cambiar el modelo! Esta reforma beneficiará a la industria y a la sociedad, generando empleos verdes y mejorando la competitividad. Vamos juntos hacia un futuro más limpio y responsable”, expresó el legislador.

Medio ambiente y competitividad 

En una reunión con la Comisión de Enlace Legislativo de la Cámara de la Industria de Transformación de Nuevo León (Caintra), Fernández dialogó con empresarios sobre las reformas en materia de sostenibilidad, en especial sobre la Ley de Economía Circular y la Reforma a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de Residuos. 

Calificó estas iniciativas como “fundamentales para la vida del país”, al tiempo que subrayó la necesidad de actualizar el marco legal en favor del medio ambiente y la competitividad nacional.

Según explicó el legislador, en México se generan cerca de 44 millones de toneladas de residuos cada año, de los cuales solo el 7% se recicla. 

Adiós plásticos

La nueva legislación busca reintroducir al sistema productivo la mayor cantidad posible de desechos —que hoy alcanzan el 44% de pérdida—, sin imponer cargas excesivas al sector privado. La propuesta involucra de manera activa a empresas, consumidores, gobierno y sociedad civil.

Entre los puntos clave de la reforma están la eliminación progresiva de plásticos de un solo uso, la prohibición de disponer residuos plásticos reciclables en rellenos sanitarios, y la creación de un sistema de información pública sobre economía circular. Además, se plantea modificar los artículos 4°, 25 y 73 de la Constitución para fortalecer el marco ambiental, distribuir competencias entre los tres órdenes de gobierno y fomentar cadenas productivas más eficientes.

“Se trata de ofrecer un modelo, una ruta de trabajo y un proceso para el desarrollo sustentable de nuestro país”, concluyó el senador Fernández. Con esta ley, México se encamina hacia un futuro más limpio, justo y competitivo.