La Casa Blanca confirmó que los aranceles al acero y aluminio mexicanos entrarán en vigor a partir de este miércoles. 

El tema de los aranceles impuestos por Trump a los productos mexicanos sigue dando de qué hablar en México. Dos pausas de un mes cada una, dieron ánimo positivo ante las tarifas que particularmente se aplicarían al acero y aluminio.

La Casa Blanca confirmó que los aranceles al acero y aluminio mexicanos entrarán en vigor a partir de la medianoche de este miércoles 12 de marzo. Esta medida, impuesta por el expresidente Donald Trump, ha sido motivo de debate y negociaciones en México.

Compás de espera

Ante la imposición de tarifas del 25 % sobre estos productos, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que esperará hasta el 2 de abril para definir las acciones de su gobierno. 

Durante su conferencia de prensa matutina, Sheinbaum destacó que, además de sostener reuniones con los fabricantes de acero y aluminio del país, su administración analizará el panorama comercial antes de tomar una decisión sobre posibles medidas recíprocas.

El 4 de marzo, Trump anunció la aplicación de aranceles contra México; sin embargo, dos días después, tras una llamada con Sheinbaum, acordó postergar su entrada en vigor hasta el 2 de abril. Según la mandataria, esta fecha coincide con el momento en que Estados Unidos ha señalado que podría establecer un esquema de aranceles recíprocos para todos los países del mundo.

Estamos negociando

Durante este periodo, los secretarios de Economía, Marcelo Ebrard, y de Hacienda y Crédito Público, Edgar Amador, trabajarán en conjunto con el secretario del Tesoro de EE. UU. para analizar el impacto de la medida y las posibles respuestas de México.

Sheinbaum enfatizó la importancia del diálogo y recordó que México y Estados Unidos mantienen un tratado de libre comercio, por lo que espera que no se apliquen aranceles recíprocos. “Vamos a esperar al 2 de abril y a partir de ahí definiremos nuestra postura sobre la imposición de aranceles al acero y aluminio”, afirmó.

El gobierno mexicano seguirá de cerca la situación en los próximos días, mientras el sector industrial y las autoridades exploran estrategias para mitigar el impacto económico de la medida.