El presidente Andrés Manuel López Obrador destacó que el rescate de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), emprendido por el Gobierno de la Cuarta Transformación, resultó en precios favorables para la economía de las familias mexicanas.
El rescate de la CFE fue por el bien de todos, y citó los casos de Europa donde los precios se incrementaron y se optó por la privatización.
“Si no se fortalece esta empresa no tendríamos precios justos en el consumo de energía. No hace falta profundizar mucho, es cosa nada más de recordar lo que sucedió hace poco en Europa”, dijo.
“Cómo aumentaron el precio de las tarifas, el precio de la luz, cómo incrementaron el costo de la luz en países europeos. Sí, por la guerra de Rusia y Ucrania, pero también porque se privatizaron los servicios de energía eléctrica”, argumentó.
Por su parte, el director general de la CFE, Manuel Bartlett Díaz, confirmó que las tarifas de luz eléctrica no han aumentado en términos reales durante la administración del presidente López Obrador.
“Se han beneficiado todos los sectores, hogares, empresas, industrias y comercios. Es un apoyo directo, genuino y de enorme importancia y trascendencia para la sociedad”, expresó.
Y es que la CFE “es una empresa de servicio público de calidad y peso”, aseguró el funcionario.
La federación fortalece a la CFE a partir de nuevos proyectos estratégicos y la modernización de obras fundamentales, entre ellas, las centrales hidroeléctricas que producirán la energía eléctrica necesaria en todo el país.
“Vamos a tener energía suficiente. Para decirlo de manera muy clara: no hay ningún riesgo de apagones, no nos va a faltar la energía eléctrica”, afirmó López Obrador.
Además, hasta en circunstancias difíciles hay una diversidad de fuentes de energía, “tenemos posibilidad de usar desde carbón hasta agua, pasando por gas, diésel, combustóleo y también lo que es la energía nuclear. Tenemos de todo, eso se va a seguir conservando”, afirmó el jefe del Ejecutivo.
El mandatario Puntualizó que la industria eléctrica nacional debe servir a la población e impulsar el desarrollo con bienestar en México, contrario a las formas privatizadoras del periodo neoliberal.
“¿Cuándo vamos a competir como país si tenemos energía cara? Porque algunas empresas hacen su agosto y no están pensando en el desarrollo de México. No están pensando que tener energía barata significa estímulos para la inversión y creación de empleos y bienestar”, argumentó.
Por lo que “ poco a poco hay que ir convenciendo de que hay cuestiones estratégicas para el desarrollo del país”, explicó.
“A algunos no les gusta porque todo lo vuelven ideología, se olvidan de la política y de los asuntos públicos; deben tomar el juicio práctico. Si la industria eléctrica nacional no tiene como propósito el desarrollo de la nación, el beneficio del pueblo, se perjudican hasta las empresas particulares, no hay garantía de que tengan insumos baratos”, agregó.
El presidente López Obrador planteó que si el Gobierno de México no hubiera recuperado a la CFE del intento de gobiernos anteriores por desaparecerla, la empresa pública sólo produciría 16 por ciento, derivado de la reforma energética de 2013, año del sexenio de Enrique Peña Nieto.
Actualmente alcanza una capacidad del 54 por ciento en la generación de energía eléctrica.
“Nosotros tenemos un sistema que hemos logrado mantener integrado y, por si fuese poco, tenemos el apoyo, el respaldo de los trabajadores, que son de lo mejor del mundo”.
La industria eléctrica, la petrolera, dijo, cuenta con excelentes trabajadores y gracias a ellos “estamos saliendo adelante”, aseveró.
Al término de la administración, agregó el titular de la CFE, el Gobierno de México heredará al pueblo una empresa pública fortalecida con más de 45 millones de clientes.
“Hoy, gracias a los cambios profundos impulsados en cada uno de los ámbitos de la vida pública del país por el presidente López Obrador, la CFE está más fuerte que nunca”, aseguró.