Imponer arancel del 17% al tomate fresco mexicano es calificada como “injusta” por las secretarías de Economía y Agricultura
Imponer arancel del 17% al tomate fresco mexicano es “injusta” por las secretarías de Economía y Agricultura. Advirtieron que afectará tanto a productores mexicanos como a consumidores estadounidenses
El Gobierno de México expresó su desacuerdo con la decisión del Departamento de Comercio de Estados Unidos de retirarse del Acuerdo de Suspensión de la Investigación Antidumping sobre el tomate fresco mexicano y de imponer una cuota compensatoria del 17.09% a sus exportaciones. La medida, anunciada este lunes, la calificaron como “injusta” por las secretarías de Economía y Agricultura, quienes advirtieron que afectará tanto a productores mexicanos como a consumidores estadounidenses.
Desde 1996, productores de tomate en Estados Unidos han buscado medidas antidumping contra el tomate mexicano, bajo el argumento de competencia desleal. Sin embargo, el acuerdo se suspendió en cinco ocasiones, la más reciente en 2019, cuando se logró restituirlo cuatro meses después de una situación similar.
Sobre la exportación de tomates mexicanos a Estados Unidos : pic.twitter.com/1EJnsmxoY8
— Marcelo Ebrard C. (@m_ebrard) July 15, 2025
Durante los últimos tres meses, el gobierno mexicano acompañó a sus productores en negociaciones con sus contrapartes estadounidenses, proponiendo soluciones constructivas. No obstante, dichas propuestas fueron rechazadas por razones políticas, pese a que ofrecían beneficios a ambas partes.
México sostiene que el éxito de su tomate en el mercado estadounidense no responde a prácticas desleales, sino a la alta calidad del producto. Actualmente, dos de cada tres tomates que se consumen en Estados Unidos provienen de México, por lo que sustituir su volumen con producción local resulta inviable en el corto plazo.
El gobierno mexicano reiteró su compromiso con los tomateros nacionales para buscar una salida negociada que levante la cuota compensatoria, tal como se logró en 2019. Asimismo, impulsará la diversificación de mercados internacionales y el fortalecimiento de esquemas de procesamiento agroindustrial que den valor agregado a la producción nacional.
México confía en que, como en ocasiones anteriores, la razón prevalecerá y se alcanzará una solución justa y equitativa que beneficie tanto a productores como a consumidores de ambos países.