Marcelo, hermano eres libre de tomar tus decisiones. Un poco así con esas palabras el presidente López Obrador volvió a hablar de la elección interna de Morena. Un proceso que calificó de transparente y ejemplo democrático. 

Y es que el día del conteo y anuncio de los resultados de la encuesta interna, el ex canciller Marcelo Ebrard, un personaje cercano a López Obrador desde hace al menos cuatro décadas, denunció irregularidades en el proceso.

El tema no ha dejado de sonar en los medios y círculos políticos, toda vez que las prácticas antidemocráticas denunciadas por Marcelo Ebrard, fueron desechadas por el partido en el gobierno. No obstante, el presidente López Obrador fue cuidadoso al referirse al que llama su amigo y hermano.

“No se puede cuestionar y mucho menos atacar a nadie. Más cuando se trata de gente como Marcelo. Es mi amigo”, dijo el presidente en la conferencia de prensa tras la entrega del “bastón de  mando” a la candidata elegida por Morena. 

Marcelo, agregó el presidente, “nos ayudó muchísimo”. Lo cual es inobjetable, si México estuvo presente en el escenario mundial y haciendo frente a los embates injerencistas de Estados Unidos, fue gracias al papel del canciller Ebrard.

“¡Imagínense! hablando ahora de política exterior, lo que me ayudó con la relación, en épocas difíciles con el presidente Trump”, entre muchas “anécdotas” de cómo el presidente norteamericano se negaba al seguimiento del Tratado comercial.

Realmente mi amigo

Las “anécdotas” no paran, pero son más que eso. La relación entre Marcelo Ebrard y López Obrador está marcada por momentos que han dado giros relevantes en la historia política. 

Tal vez al presidente le venga bien solo decir que Marcelo “es una gente buena, en sentido amplio. Es un hombre muy preparado, tiene mucha experiencia política. Es mi amigo, así lo considero”.

Más que buena persona y experimentado político, Ebrard  se la ha rifado por López Obrador, le ha abierto las fronteras en su gestión como presidente y también le allanó el camino, declinando en su favor. 

La primera de estas declinaciones tuvo lugar en 1999, cuando Marcelo Ebrard se postuló como candidato para el gobierno del entonces Distrito Federal bajo las siglas del Partido de Centro Democrático (PDC). 

En plena campaña, Ebrard tomó la decisión de declinar en favor de Andrés Manuel López Obrador, quien se postulaba como abanderado del Partido de la Revolución Democrática (PRD). Esta acción resultó crucial para López Obrador, ya que le permitió ganar la elección frente al panista Santiago Creel.

La segunda declinación ocurrió aproximadamente doce años después, en 2012, cuando Ebrard y AMLO compitieron dentro del PRD por la candidatura presidencial. A pesar de que las encuestas arrojaban un empate técnico, Marcelo Ebrard optó por ceder a favor de López Obrador

Así no Andrés

Estos hechos los relató Marcelo Ebrard el pasado 6 de septiembre de 2023, cuando denunció las prácticas antidemocráticas de Morena en el proceso de elección.

Pero ese día también enfatizó que ya no más. Esta vez no aceptará imposiciones y defenderá sus ideales. Y aunque esa ocasión subrayó que Morena había sido creado para devolver la democracia a México. Al día siguiente anunció su salida de Morena, el partido que fundó al lado de quien lo llamó amigo.