Entre las sustancias destruidas por la FGR se encuentran acetato de etilo, ácido acético, hidróxido de amonio, metanfetamina y tramadol, entre otros. 

La Fiscalía General de la República (FGR), a través de su delegación en Jalisco, logró la destrucción de más de seis toneladas de precursores químicos. Además de 416,751 tabletas de fentanilo, productos vinculados a nueve investigaciones judiciales. Lo anterior, resultado del trabajo coordinado de la FGR en Jalisco con los tres niveles de gobierno. A través del cual se logró el aseguramiento de precursores químicos en diversos operativos y cateos realizados en la entidad.

Este logro es resultado de la colaboración entre los tres niveles de gobierno, con operativos y cateos efectuados en diversas localidades del estado.

Duro golpe

Entre las sustancias destruidas se encuentran productos químicos como acetato de etilo, ácido acético, hidróxido de amonio, metanfetamina y tramadol, entre otros. 

También se eliminaron casi siete kilos de fentanilo puro y otras sustancias nocivas para la salud. La incineración y disposición final de estos materiales se realizó a través de una empresa especializada en manejo de químicos, garantizando un proceso seguro y responsable.

Estrategia contra el narco

La FGR destacó que este operativo es parte de una estrategia integral contra el narcotráfico y la producción de drogas sintéticas. Según un comunicado reciente, estas acciones se enmarcan en la estrategia nacional de seguridad, que incluye atención a las causas sociales, el fortalecimiento de la inteligencia, la consolidación de la Guardia Nacional y la coordinación entre las entidades federativas.

Resultados

En paralelo, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García, informó que entre octubre y diciembre de este año se incautaron 61.1 toneladas de droga, 428,578 pastillas de fentanilo, 3,023 armas de fuego y 557,845 cartuchos, además de detener a 6,745 personas por delitos de alto impacto.

Con estos esfuerzos, el gobierno federal busca reducir la oferta de sustancias ilícitas en el país y proteger a la población de los riesgos asociados al narcotráfico. La destrucción de estos materiales representa un golpe significativo a las redes criminales que operan en la región y refuerza el compromiso de las autoridades en la lucha contra las drogas sintéticas.