Dina Boluarte, la mujer que usurpó la presidencia de Perú, es investigada por enriquecimiento ilícito.
Se les dijo. Bueno, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) por algo no quiso ni cruzar palabra y menos salir en la foto con ella. Recordemos que Dina Boluarte usurpó la presidencia mediante una argucia legal que quitó al presidente legítimo Pedro Castillo.
Resulta que la señora Boluarte, que para muchos ya es conocida como “la Presidenta de los Rolex”, está siendo investigada por enriquecimiento ilícito. ¡Pero qué cosas! Y claro, para este tipo de espectáculos, nunca faltan los invitados estelares.
¿Recuerdan cuando nuestro querido presidente Andrés Manuel López Obrador? no sólo la evitó en aquella reunión de la APEC, sino que una tras otra insistió en su conferencia de prensa que Boluarte no es la presidenta legítima de Perú. Insistió en que debería regresarle el cargo a Pedro Castillo. Pero no. Afortunadamente las cosas caen por su propio peso y la señora Boluarte se hace notar y ahora es evidenciada.
El drama no se hizo esperar. En pleno Viernes Santo, cuando muchos rezaban por la paz del mundo, la policía decidió darle un toquecito a la puerta de la casa de Boluarte, y no precisamente para pedir un vaso de agua fresca.
Con una barra de hierro, digna de cualquier película de acción, irrumpieron en la residencia como si estuvieran grabando una escena de Hollywood.
La cosa empezó a cocerse hace unos meses, cuando apenas estaba estrenando su silla presidencial. Desde marzo de 2023, la señora Boluarte está en el ojo del huracán. Acusada de enriquecimiento ilícito y hasta de olvidarse de mencionar algunos detalles en sus papeles públicos. ¡Parece que alguien no revisó bien el manual de cómo ser presidenta!
Pero no todo es tan fácil como parece. El primer ministro, Gustavo Adrianzén, salió al rescate defendiendo a capa y espada a la ahora llamada “Dina de los relojes”. Según él, los operativos fueron un poco exagerados y ni se les ocurra pensar que Boluarte va a soltar el puesto así nomás.
Mientras tanto, en redes sociales la cosa no se quedó corta. La Presidencia de Perú quiso dar su versión del asunto, asegurando que todo fue como sacado de un manual de cortesía. Y es que, al parecer, hasta en los allanamientos hay que tener buenos modales.
Pero lo más jugoso de todo esto, lo que todos estábamos esperando, son los relojes. Sí, esos relojes Rolex que ahora son más famosos que la Plaza Mayor de Lima. La fiscalía los buscaba como el Santo Grial, pero ¿adivinen qué? ¡Los encontraron! O al menos eso dice la defensa de Boluarte.