Obras son amores, reza el refrán. Así el presidente Andrés Manuel López Obrador presenta con hechos, los avances de su gestión. Y pésele a quien le pese, la Cuarta Transformación, va.

“Contra viento y marea y aunque no le guste a The Economist, a los conservadores ni al sabiondo de Zaid, la transformación pacífica, democrática y con dimensión social es imparable”.

Así lo afirmó desde Chiapas, donde visitó las hidroeléctricas a cargo de la Comisión Federal de Electricidad, las cuales están en un proceso de modernización que implica cambio de turbinas, las cuales ya tienen muchos años de servicio.

A través de un video en sus redes sociales, el primer mandatario informó que la atención a cuatro hidroeléctricas del Río Grijalva permitirá la producción de energía limpia y barata. 

Asimismo señaló que de las 60 presas del país, el embalse de la presa Belisario Domínguez de Chiapas, desde donde transmitió el video, es donde se acumula la mayor cantidad de agua de todo México.

Con alrededor de 18 mil millones de metros cúbicos de agua. Cuando se construyó esta presa los ingenieros especialista en hidráulica utilizaron las condiciones naturales, es decir el cañón.

Gracias a la vida

El mandatario nacional dijo que toda el agua que se acumula en dicho embalse alcanzaría para abastecer a todos los mexicanos durante un año y medio.

“Es algo grandioso, extraordinario. Es fruto del trabajo de los mexicanos. Desde luego también de la naturaleza. Por eso decimos: gracias a la vida que nos ha dado tanto”, expresó el presidente López Obrador.

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M21