Afores por aquí, Afores por allá. El dinero ahorrado por los trabajadores en las llamadas Afores (Administradora de Fondos para el Retiro) son el tema de la semana. Los opositores al gobierno decían que dichos ahorros se los quería robar el presidente López Obrador. Pero, como queda claro, que el pecho de nuestro presidente no es bodega, hoy en la mañanera señaló con nombre y apellido a uno de los grandes jinetes de las Afores.
Se trata de Ricardo Salinas Pliego, conocido en su mundo como Tío Richi. Así es, el multimillonario dueño de Televisión Azteca, medio de comunicación que dicen las malas lenguas, también se lo agenció mediante triquiñuelas, salió a relucir como uno de los que han hecho su guardadito con las Afores.
“¿Qué los lleva a mentir, que ‘nos vamos a robar las afores’? Esto: ellos tienen mil 847 millones que transferir al Seguro Social. Están obligados por ley, ya se tenía que estar regresando todo desde el año 2020”, relató el presidente López Obrador.
Pero resulta, dijo el presidente de México, que las empresas de otro riqui riquín canallín, sólo han regresado 19 millones. Es como el uno por ciento, reveló.
Durante su conferencia matutina, el presidente reveló que la Afore Azteca, administrada por Grupo Salinas, tiene un adeudo de mil 780 millones de pesos con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), por fondos no reclamados por los trabajadores.
Este señalamiento surge en el contexto de la discusión sobre la reforma del ahorro para el retiro, donde los ataques de TV Azteca han sido notorios. Y es que el Tío Richi Richín Canallín está usando a sus medios y lectores de noticias para decir que el gobierno de López Obrador le quiere quitar el dinero ahorrado a los trabajadores.
Al ladrón, al ladrón, grita el ladrón. Así dicen en mi pueblo cuando el culpable trata de tapar el sol con un dedo. Pero es que la verdad nunca se esperan que el presidente López Obrador tiene autoridad moral para señalar por su nombre la corrupción y a los corruptos.
En este caso al empresario que no cesa en sus ataques al gobierno de México y sus funcionarios. Gobiernícolas les dice el Tío Canallín.
López Obrador destacó la importancia de que los trabajadores tengan acceso a sus ahorros para el retiro, subrayando que el Seguro Social es la institución encargada de custodiar estos fondos por ley. Además, hizo hincapié en la necesidad de evitar los conflictos de interés entre los dueños de medios de comunicación y otras actividades financieras, calificándolos de inmorales.
Bueno, y por si fuera poco, Salinas Pliego tiene otro pendiente con el gobierno. Se trata de la deuda millonarios con el pago de impuestos. Sea tal vez por eso que usando los noticieros de TV Azteca, las redes sociales y todos los medios a su alcance, que trata de levantar una cortina de humo.
Pero Salinas Pliego, desde su insultante riqueza y su absoluta soberbia, se olvida que el pueblo tiene memoria. Y el pueblo ni perdona ni olvida. Así, una y otra vez le estará recordando que debe al SAT la friolera de 63 mil millones de pesos. Este monto incluye créditos fiscales emitidos durante la actual administración, relacionados principalmente con el tema de consolidación fiscal.
La revelación de estos adeudos fiscales se produce en un contexto donde se han intensificado los debates sobre la equidad fiscal y los privilegios de ciertos actores económicos en el país. El presidente López Obrador anunció que todas las pruebas relacionadas con estos juicios fiscales serán publicadas en una página web del Gobierno federal, invitando a Salinas Pliego a presentar pruebas que respalden sus acusaciones de extorsión por parte del Gobierno.