Las  Tiendas del Bienestar impulsan la producción local y venta de canasta básica a bajos precios. En todo el país se renovarán 24,604 tiendas

En un esfuerzo por fortalecer las economías locales y garantizar el acceso a productos de la canasta básica a precios accesibles, el Gobierno de México ha puesto en marcha las Tiendas del Bienestar, una iniciativa que busca revitalizar el comercio comunitario y combatir el intermediarismo.

Abasto rural

La presidenta Claudia Sheinbaum inauguró en San Ángel Zurumucapio, comunidad indígena con autogobierno en el municipio de Ziracuaretiro, Michoacán, la primera Tienda del Bienestar a nivel nacional. Este proyecto, enmarcado dentro del Programa de Abasto Rural, tiene como objetivo ofrecer alimentos de calidad y dar valor agregado a productos locales como café, cacao, miel y los emblemáticos “chocolates del Bienestar”.

El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, subrayó el simbolismo de esta acción para las comunidades rurales e indígenas de la entidad, que ahora cuentan con una alternativa para comercializar sus productos a precios justos. Asimismo, destacó que esta iniciativa forma parte de los Planes de Justicia y Desarrollo Regional, financiados con un presupuesto federal dirigido a comunidades indígenas.

Esfuerzo de participación social y comunitaria

Por su parte, María Luisa Albores González, directora general de Alimentación para el Bienestar, explicó que las Tiendas del Bienestar representan un esfuerzo de participación social y comunitaria. En todo el país, se renovarán 24,604 tiendas, 832 de ellas en Michoacán, bajo el programa #EnchulaTuTienda, que busca recuperar la esencia comunitaria de estos establecimientos.

Por el bien de todos

Con tres propósitos fundamentales —adquirir productos locales a precios justos, ofrecer alimentos accesibles sin intermediarios y agregar valor a la producción— las Tiendas del Bienestar son un ejemplo del espíritu fraterno y solidario del pueblo mexicano, resaltó Sheinbaum.

La puesta en marcha de este programa reafirma el compromiso del Gobierno de México con las comunidades rurales, impulsando la producción local y promoviendo el bienestar de las familias mexicanas.