El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) lamentó el asesinato del líder de las autodefensas de Michoacán, Hipólito Mora, acusó que el hecho es remanente del narcoestado heredado por Felipe Calderón.
“Es muy lamentable lo que sucedió, no deja de preocupar, es muy triste, doloroso para familiares cuando una persona es asesinada. Nosotros lo lamentamos mucho”, declaró AMLO.
“Esto que está sucediendo tiene como antecedente lo que se provocó en el pasado: es un remanente de la violencia que se auspició desde el gobierno de Felipe Calderón”, aseveró.
Y recordó la “inhumana” e “irresponsable” declaración de guerra contra el narco lanzada por Calderón en Michoacán.
“Acuérdense que hubo un narcoestado en México durante el gobierno de Calderón”, remarcó.
El presidente AMLO destacó que ante la herencia violenta su gobierno está empleando otra estrategia.
“Todo eso es lo que heredamos y estamos llevando a cabo otra estrategia, muy cuestionada por estos que aplaudían la represión”.
“Es más, llegaban a acuerdos los medios de información con el Gobierno para no difundir noticias que tenían que ver con la violencia”.
Hoy la noticia de Hipólito Mora ocupa las ocho columnas de los medios, pero “antes se callaban por completo”.
Hipólito Mora fue líder de los grupos de autodefensas de Michoacán, en La Ruana.
En 2013 organizó a la población para hacer frente al cártel de Los Caballeros Templarios.
Su decisión de declarar la guerra a la delincuencia se materializó cuando los criminales prohibieron a su hijo recolectar limones en su propia finca.
A lo largo del presente año, denunció en diversas ocasiones amenazas en su contra, además de ser víctima de otros ataques.
En marzo pasado, informó que sufrió un ataque, hiriendo a un escolta y una empleada de la refaccionaria.