Guadalupe Taddei, Consejera Presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), exigió a la oposición respetar el color rosa, distintivo institucional del INE. Sin embargo, la oposición ha ignorado su exhortación y los promotores de la candidata del Prian se visten de rosa, desoyendo la recomendación del árbitro electoral.
Taddei manifestó su preocupación por el uso indebido del color rosa, considerado un emblema del INE, por parte de organizaciones políticas y sociales que apoyan abiertamente a la candidata del Prian. Durante su declaración, calificó este uso como una “transgresión” a la línea de respeto que deben mantener las instituciones y los partidos políticos.
“El color institucional del INE es el rosa; el uso por otras organizaciones hoy, en apoyo político abierto a una candidatura, no abona al respeto que ambas instituciones hemos manifestado siempre”, afirmó Taddei.
A pesar de este llamado de Taddei, los promotores de la candidata del Prian no sólo se han apropiado del color institucional del INE, sino que se han autollamado “marea rosa”, slogan y color que utilizan para convocar a su manifestación prevista para el domingo 19 de mayo en el Zócalo.
Esta actitud desafía a la autoridad electoral y plantea serias preguntas sobre el compromiso de estos grupos con las reglas y principios democráticos.
Las agrupaciones, que en un principio se presentaron como apartidistas, ahora parecen claramente alineadas con una agenda política específica, la que impulsa Claudio X González. Este cambio en la narrativa subraya un realineamiento estratégico que podría tener implicaciones significativas para la percepción pública y la credibilidad de estos movimientos.
El llamado de Taddei a la reflexión y al respeto mutuo no debe ser desestimado. En un sistema democrático, la neutralidad y el respeto por las instituciones son pilares fundamentales. La negativa de la oposición a respetar el color rosa del INE no solo desafía a la autoridad del árbitro electoral, sino que también erosiona la confianza pública en el proceso electoral y en las instituciones que lo respaldan.
“Hago el llamado a que reflexionemos en el uso y el transgredir esta línea de respeto de ambas partes, es un llamado a todos, a todos los que podamos usar o no estos colores, porque también los podemos observar en otras áreas de la vida, pero sí es un llamado de respeto”, expresó Taddei.