El Senado de la República aprobó este miércoles una reforma constitucional que prohíbe y sanciona el uso ilícito de fentanilo, así como las actividades relacionadas con cigarrillos electrónicos y vapeadores.
Con 110 votos a favor, cinco en contra y dos abstenciones, la reforma contra el fentanilo ilícito y vapeadores se enviará a las legislaturas estatales para su revisión y eventual ratificación.
La modificación incluye la adición de un quinto párrafo al artículo 4° y un segundo párrafo al artículo 5° de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Estas disposiciones buscan garantizar el derecho a la protección de la salud, estableciendo que se castigará la producción, distribución y venta de sustancias tóxicas, precursores químicos, y drogas sintéticas no autorizadas, incluido el fentanilo ilícito.
Asimismo, la reforma prohíbe toda actividad profesional, industrial o comercial relacionada con vapeadores y otros dispositivos electrónicos análogos que puedan representar un riesgo para la salud.
Enrique Inzunza Cázarez del partido Morena, presidente de las comisiones unidas de Salud, Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos, destacó que la reforma tiene un doble propósito: proteger la salud de la población y reforzar la lucha contra el crimen organizado. “Este proyecto refleja la postura del Estado mexicano de priorizar el bienestar de las personas y combatir el tráfico de sustancias peligrosas”, declaró.
Por su parte, la senadora Lilia Margarita Valdez Martínez, de Morena, señaló que el uso de vapeadores entre adolescentes es un problema de salud pública.
De acuerdo con datos de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), cerca de 938 mil adolescentes en México han usado vapeadores al menos una vez, y 160 mil los consumen regularmente. “El daño a los pulmones y el riesgo de desarrollar cáncer es raz suficientes para impulsar estas medidas”, afirmó.
El dictamen también responde a preocupaciones internacionales sobre el creciente uso de fentanilo, una droga sintética extremadamente potente vinculada a numerosas muertes por sobredosis en todo el mundo. Aunque el uso médico del fentanilo continuará regulado, su producción y uso ilícitos se penalizarán severamente.
El Senado destacó en un comunicado en la red social X que la reforma refuerza el compromiso del país con la salud pública y la seguridad. “Con estas medidas buscamos proteger a las y los mexicanos de los graves riesgos asociados a estas sustancias”, señaló el mensaje.
Ahora, la reforma se analizará por los congresos locales, donde necesita la aprobación de al menos 17 entidades federativas para su promulgación. Si esto ocurre, México podría convertirse en uno de los primeros países en incluir la prohibición del fentanilo ilícito y los dispositivos de vapeo en su Constitución.
A pesar del amplio respaldo en el Senado, la reforma enfrentó críticas de legisladores que presentaron reservas para modificar el dictamen. Estas propuestas fueron desestimadas, lo que generó opiniones divididas sobre la efectividad y el alcance de las nuevas disposiciones.
Con este avance legislativo, el país reafirma su compromiso con la protección de la salud y el combate a las actividades ilícitas, enviando un mensaje claro sobre la importancia de atender los desafíos contemporáneos en materia de salud y seguridad.