La recaudación de auditorías y promoción del cumplimiento en el pago de impuestos refleja un notable incremento de 2.1 billones de pesos. Se trata de un crecimiento del 113.7 por ciento en términos reales comparado con el sexenio anterior. Así lo destacó el presidente Andrés Manuel López Obrador, basándose en datos del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Hasta mayo de 2024, la administración actual logró la recaudación de 3.3 billones de pesos gracias a la participación de contribuyentes grandes, medianos y pequeños. Así como a la política de no permitir la condonación de impuestos en el Gobierno de la Cuarta Transformación.
Este logro en la recaudación es crucial para financiar los Programas para el Bienestar, dijo el presidente López Obrador. Dichos programas atienden a la población más vulnerable del país, según explicó el mandatario en una conferencia de prensa matutina.
Durante su intervención, el presidente subrayó la importancia de continuar combatiendo la corrupción, eliminar el influyentismo y mantener una política de austeridad. “Hay que seguir combatiendo la corrupción, acabar con el influyentismo y hacer una política de austeridad”, afirmó ante los representantes de los medios de comunicación.
López Obrador reafirmó que el presupuesto es suficiente. Sin necesidad de crear nuevos impuestos, aumentar los precios de las gasolinas o adquirir deuda.
Gracias a estas medidas, es posible consolidar obras de infraestructura e iniciativas sociales. Lo cual marca una diferencia con administraciones anteriores, que destinaban gran parte del presupuesto al propio gobierno.
“El gobierno no puede consumir tanto presupuesto; debe ser eficaz y austero, no ensimismarse. Antes, el presupuesto se quedaba en el gobierno y no se entregaba a la gente.
“Todo era para gasto corriente; sin inversión para el desarrollo o el bienestar del pueblo. Ahora, con la austeridad, se liberan muchos fondos para la gente”, explicó el presidente, destacando los beneficios de su enfoque en la administración pública.