Vecinas, vecinos, vecines:
Mañana vamos a salir a elegir a nuestros consejeros distritales. Han sido difíciles semanas en las que hemos visto compas dando la pelea para llegar al encargo.
También hemos escuchado historias de quién es más puro que el otro, y quien tiene más lopezobradorismo en las venas que el otro.
Otra cosa que vimos estos días fue a las “ballenas” las, los y les funcionaries que tienen a su favor la plataforma política de sus puestos, y en algunos casos hasta padrones, listados y recursos.
También, nos encontramos con los chapulines, que los más puros llaman “ambiciosos vulgares”, pues a mi me parece que son ambiciosos y ya.
Y un “animal político” sin ambición no es animal ni político.
También vimos algunas, poquísimas propuestas, unos quieren ser consejeros para cambiar los estatutos. Bueno, como hemos visto, se puede modificar el alcance y reglas del estatuto sin necesidad del Consejo o de los consejeros, así lo ha demostrado esta Convocatoria 2022, así como las elecciones emergentes de los años pasados por los cuales hoy tenemos secretaria general y presidente de partido hasta 2023.
Desde luego que hace falta un cambio de estatutos, pero eso lo decidirán los consejeros a partir de los acuerdos con las bases que representan, o eso esperamos quienes todavía creemos en este proyecto.
Con toda franqueza yo les puedo compartir mi sentir: hay dos tipos de políticos:
Muchos de los consejeros van a llegar a votar aquellas cosas del interés del grupo, o liderazgo al cual obedecen. Y llegarán sólo a votar o hacer lo que les ordenan, como ocurre hoy en día, de por sí.
Pero habrá otros que hagan política. Esos van a construir territorio, alianzas y consensos en vísperas de obtener más votos para el partido (sin importar les candidates) para las campañas de 2023 y 2024.
Está bien fácil de diferenciarlos, es más haz el ejercicio y en este momento ya sabrás de esa enorme lista, quién es quién…
Después de todo eso es la política electoral, y este fue el camino que decidimos tomar.
Algunos dicen que Morena no es una máquina electoral, pero los que dicen eso, ya son parte de la máquina, y lo han sido desde el principio.
Pero todo ese tema de la pureza es irrelevante. Más no el tema de la militancia y la congruencia en nuestra lucha, esa sí que es fundamental.
Ser de izquierda es la cosa más difícil, porque lo primero que aprendes es que hay que trabajar y construir con lo que hay.
Y lo que habrá a partir del lunes próximo es un conjunto de 10 consejeres por distrito, que, si no aprenden a trabajar por los objetivos de la unidad partidaria, no sólo nos van a traicionar, sino que van a quedar en el basurero de la historia.
Lo importante somos nosotros, los vecinos, las vecinas, les vecines. Nosotros hacemos otra política, la de todos los días, la de la participación ciudadana, la vecinal, la que genera comunidad y convivencia.
Lo importante de este proceso, es no dejar de reunirnos, de organizarnos y de caminar hacia el futuro.
La continuidad de nuestro proyecto no depende de discursos, ni de pugnas, ni de la pureza, ni de la ambición, ni de la ideología. Salir a votar mañana por cualquiera de estos compas, solo es un trámite.
La auténtica política somos nosotros, en la participación de nuestros comités y de nuestras luchas territoriales.
Así que el día de mañana nos veremos para ejercer este importante derecho, y así cumplir con el requisito que malamente y obtusamente cumple la sentencia del TEPJF de 2020, pero que nos da la oportunidad de continuar organizándonos, de conocer mejor a todas, a todes y a todos. De empoderar nuestro proyecto, con y sin “animales políticos”.
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M21