Por si estaban con el pendiente respecto a las reglas de etiqueta o por qué, específicamente, nuestro Presidente no se desabrochó el botón, aquí les contaremos la razón.

Después de los dimes y diretes de expertos opinólogos de las reglas de etiqueta, de la formalidad y el buen vestir, este día se despejaron las dudas de por qué durante su encuentro con Joe Biden en el Salón Oval de la Casa Blanca, el mandatario mexicano omitió abrirse el saco.

Escándalo monumental causó en redes y los opositores a la Cuarta Transformación no perdieron detalles de cómo se sentó, de las arrugas del traje, de los zapatos lustrados y de los botones del saco.

Hay que reconocer que se pierden en detalles, sí, se pierden en la forma y olvidan del fondo. 

Sería bueno saber cuántos de los opinantes se enteraron de las propuestas presentadas en ese lugar que los conservadores ven como si fuera la mismísima Basílica de San Pedro. Pero no, ahora resulta que además de que se creen dueños de la moral también lo son de las buenas costumbres. Escándalo total.

Qué escándalo

Y es que están molestísimos, dijo López Obrador  para referirse a los opositores a su gobierno. “Primero decían que como no había asistido a la Cumbre que no me iban a volver a recibir en la Casa Blanca, que me iban a regañar, que me iban a jalar las orejas”.

Luego los especialistas del antiguo régimen, del neoliberalismo, los internacionalistas, decían, ah, pero no es visita de Estado. 

Luego un experto o experta dando cátedra sobre qué es una visita oficial, qué es una visita de Estado, qué es una visita de trabajo. 

“Toda es formalidad casi monárquica, los fascina”, destacó el presidente López Obrador con sobrada razón.

Y para aquellos que siguen con el pendiente de por qué no se desabrochó el saco, fue por una razón simple y sencilla: porque “se me iba a ver la panza”.

Pero cuidado, a los regidores de la etiqueta tampoco les iba a gustar el saco abierto, porque esa panza, dirían era “por la barbacoa, por los tamales de chipilín, los chanchamitos, los tlacoyos, la torta de chilaquil, la guajolota y todo eso”.

Se pasan

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M21