El Corredor Interoceánico no es sólo una obra de infraestructura clave, sino también un motor de desarrollo regional para frenar la migración. Así lo afirmó la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena.
En un esfuerzo decidido para promover el desarrollo industrial y energético de México, una delegación encabezada por la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena Ibarra, y el secretario de Marina, almirante Rafael Ojeda Durán, presentó ante autoridades federales de Estados Unidos y empresarios el ambicioso proyecto del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT).
Este proyecto busca establecer una conexión comercial estratégica entre los océanos Atlántico y Pacífico, fomentando la conectividad y el crecimiento económico en la región sur-sureste de México.
Durante una visita de trabajo en Washington D.C., los funcionarios mexicanos se reunieron con Amos Hochstein, asesor principal del presidente Biden para Infraestructura Global y Seguridad Energética, y Elizabeth Sherwood-Randall, asesora de Seguridad Interior.
En el encuentro, se destacó la importancia del CIIT como una plataforma logística clave que conecta los puertos de Salina Cruz, Oaxaca; Coatzacoalcos, Veracruz; Puerto Chiapas, Chiapas; y Dos Bocas, Tabasco. Este corredor comprende 1,200 kilómetros de vías férreas y un extenso sistema carretero, permitiendo una conexión eficiente para el transporte de mercancías a nivel internacional.
“La solución de la migración en la frontera norte está en el desarrollo del sur”, subrayó la secretaria Bárcena, resaltando que el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec no es sólo una obra de infraestructura clave, sino también un motor de desarrollo regional.
Con esta iniciativa, el gobierno mexicano busca abordar las causas fundamentales de la migración al generar empleos y mejorar la calidad de vida en el sur-sureste de México, promoviendo oportunidades económicas que fomenten que las personas permanezcan en sus comunidades de origen.
La delegación mexicana también presentó los avances de los Polos de Desarrollo para el Bienestar (Podebis), áreas estratégicas destinadas a atraer inversión y dinamizar la economía local con una visión sustentable e incluyente. Estos polos se están desarrollando con la intención de ofrecer condiciones óptimas que fomenten la inversión productiva y el crecimiento económico en la región, impulsando un cambio positivo que trascienda fronteras.
En un evento organizado por la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, la comitiva mexicana se reunió con empresarios y representantes del sector privado para destacar los beneficios comerciales del CIIT. Se señaló que el Corredor representa una alternativa moderna y eficiente para el comercio global, facilitando el acceso a mercados clave como Estados Unidos, Asia, Centro y Sudamérica. Gracias a su ubicación estratégica, el proyecto tiene la capacidad de atender hasta el 10% de la demanda en las regiones Este y Medio-Oeste de Estados Unidos, reduciendo significativamente los costos intermodales y los tiempos de tránsito.
El proyecto CIIT no solo ofrece ventajas logísticas, sino que también está respaldado por un decreto de beneficios fiscales emitido el año pasado. Este marco de incentivos busca atraer inversiones que generen empleos y promuevan el desarrollo económico en la región sur-sureste de México, fortaleciendo las capacidades productivas y la integración de las cadenas de suministro de América del Norte.
La visita de la delegación mexicana a Estados Unidos también sirvió para reafirmar el compromiso del Gobierno de México con el desarrollo económico sostenible y la integración regional. El CIIT fue presentado como un proyecto transformador que posicionará a México como una zona logística de relevancia mundial, capaz de fomentar un crecimiento económico significativo y sostenible en la región.
Este encuentro subraya la colaboración entre México y Estados Unidos en pro del desarrollo económico y la integración regional, y destaca la relevancia del Corredor Interoceánico como un catalizador para la transformación de la región sur-sureste de México. Con proyectos como este, México no solo busca posicionarse como un jugador clave en el comercio internacional, sino también como un país comprometido con la creación de oportunidades y la reducción de la migración a través del desarrollo sostenible y la integración económica.
El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec se perfila como una solución integral que no solo dinamiza la economía, sino que también ofrece una respuesta viable a uno de los problemas más acuciantes de la región: la migración. Con la implementación de este proyecto, se espera que más personas encuentren en sus comunidades de origen las oportunidades necesarias para una vida digna y próspera, contribuyendo así a un futuro más equitativo y sostenible para todos.