Los que andan muy preocupados son el líder del conservador Partido Acción Nacional y el representante de la Organización de Estados Americanos.
Tanto que se reunieron virtualmente para discurrir sobre la “intromisión” del Presidente López Obrador en el proceso electoral.
¡Ay nanita! dirá la mandatario nacional quien hace tres días dejó claro que puede venir la OEA, la ONU o la institución que sea, porque él no tiene nada que esconder.
Y ya no se sabe qué es peor, que en el supuesto ánimo demócrata el conservador panista Marko Cortés, vaya y acuse al Presidente López Obradro, o que la OEA se ponga de pechito a escuchar las quejas.
Nomás hay que recordar el papel del organismo internacional, o sea la OEA, en el golpe de Estado contra Evo Morales. El informe que avaló un fraude para derrocarlo.
Lo cortés no quita lo corrupto
El caso es que andan muy encorbatados y circunspectos, hablando de “intromisión” cuando ambas instituciones, o sea el PAN y la OEA se han pasado la democracia propia y ajena, por el mal llamado arco de triunfo.
Hablando de orejas
Y dice el líder panista que el gobierno del Presidente Andrés Manuel lo hostiga y persigue a actores políticos y que incluso presiona al INE, a sus consejeros y le tiene ojeriza al Tribunal Electoral.
Y dice que está muy preocupado ante “la intromisión del presidente Andrés Manuel López Obrador en las elecciones, pues funge como vocero principal de la campaña morenista”.
Y dice que “desde Palacio Nacional lanza una campaña en contra del PAN y la coalición “Va por México”.
Buenos amigos
Lo bueno de ser buenos amigos, es que Santiago Cantón, quien está en México como parte de la Misión de la OEA para observar el proceso electoral, le dio la bienvenida a su queja.
¡Ay, nanita!