El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) debe ampliarse hacia los países de América Latina y el Caribe para convertir a la región en un potencial económico mundial.
Así lo expresó la presidenta Claudia Sheinbaum en su habitual conferencia de prensa en Palacio Nacional al reiterar la postura de México en torno al T-MEC,
Sheinbaum reafirmó su visión de expandir el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) hacia América Latina y el Caribe, destacando que esto podría convertir al continente en una potencia económica global.
“Nuestra visión es que el Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) debería ampliarse en muchos sentidos hacia el sur”, expresó la mandataria. Según Sheinbaum, la integración regional permitiría aprovechar las fortalezas de cada país para competir con las economías más grandes del mundo.
La presidenta también destacó la importancia de fortalecer la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), un organismo que fomenta el diálogo y la cooperación en la región.
“La Celac es una organización de toda América Latina y el Caribe, y más allá incluso de la afinidad con los gobiernos progresistas, creemos que es muy importante la unidad en muchos temas”, subrayó.
Sheinbaum también informó que conversó con el presidente de Colombia, Gustavo Petro, sobre la próxima reunión de la Celac, programada para marzo de 2025. Actualmente, Honduras ocupa la presidencia del organismo, la cual se transferirá a Colombia en el evento.
“Hablamos de la importancia de la reunión de Celac, varios temas relacionados, y también de una agenda que incluye temas educativos, culturales y otras coordinaciones”, explicó la presidenta. Este encuentro es parte de un compromiso asumido durante la cumbre del G-20 realizada en noviembre en Río de Janeiro, Brasil.
Sheinbaum enfatizó la afinidad que México mantiene con otros gobiernos progresistas en la región, mencionando a Chile, Bolivia, Brasil, Honduras, Guatemala, Venezuela, Cuba y Uruguay. “Son gobiernos progresistas que tenemos muchas cosas en común”, sostuvo, al tiempo que reiteró la relevancia de una mayor colaboración entre estos países.
Con esta postura, la presidenta reafirma su compromiso de posicionar a México como un actor clave en la integración económica y política de América Latina, apostando por el fortalecimiento de las relaciones comerciales y la unidad regional.