“El Tren Maya le dice al mundo que México es una gran nación, que todos los días hace proezas, que nos dan fuerza, valor y que a México se le respeta”, aseguró la presidenta Claudia Sheinbaum.
En su visita al sureste del país, celebró el primer aniversario del Tren Maya con la inauguración de los tramos 6 y 7 que van de Escárcega a Chetumal. Tramos que abarcan 1,554 km del proyecto ferroviario que cruza cinco estados del sureste: Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Al encabezar el primer aniversario y la inauguración de los tramos 6 y 7 del Tren Maya, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo sostuvo que este transporte ferroviario es un símbolo de la Cuarta Transformación, que le dice al mundo que México es una gran nación con un pueblo consciente y politizado.
“El Tren Maya le dice al mundo —que se oiga bien y que se oiga lejos— que las y los mexicanos venimos de lejos, pero también vamos lejos, con la esperanza en el corazón y el orgullo de la grandeza cultural que nos da identidad y que sostiene al humanismo mexicano”, afirmó.
Reconoció que este proyecto es uno de los grandes legados del expresidente Andrés Manuel López Obrador, por ello, felicitó a los trabajadores de la construcción, a antropólogos y arqueólogos.
As como a las empresas constructoras, al Agrupamiento de Ingenieros “Felipe Ángeles” y a la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa), por hacer posible este proyecto integral, que comprende un recorrido total de 1,554 kilómetros de vía ferroviaria, que cubren toda la península y que cruzan cinco estados: Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
“El Tren Maya levanta en su grandeza un símbolo en contra de la discriminación, el racismo y el clasismo del antes y el de ahora. Significa, además, justicia social porque provee bienestar y desarrollo con justicia para las comunidades y los pueblos del sureste de México; es decir, no fue en contra, como algunos quisieron inventar, sino con y para las comunidades del sureste de México”, agregó.
Puntualizó que como parte del proyecto se crearon nueve Áreas Naturales Protegidas y siete áreas de protección con más de un millón 397 mil hectáreas (ha), protegiendo y fomentando la naturaleza, así como al turismo sustentable.
Además, la obra generó más de 600 mil empleos y se avanza con la creación de polos de desarrollo en cada una de sus 34 estaciones.